Jill Kennedy Directora, Hong Kong
En 2011 me incorporé al equipo directivo de Currie & Brown. Actualmente estoy a cargo de un equipo de gestión de costes en Hong Kong que trabaja en una variedad de proyectos, desde proyectos de acondicionamiento de oficinas hasta un gran proyecto de ingeniería civil en el aeropuerto. Dentro de la empresa he ido ocupando distintos cargos empezando por el de inspector de obras hasta desempeñar un papel directivo como responsable de equipos, de la obtención de nuevos contratos y con una mayor participación en la dirección del negocio.
Me incorporé a Currie & Brown (antes llamada Widnell) en enero de 1997 como inspector de obras del proyecto de construcción de un hangar nuevo para HAECO (Hong Kong Aircraft Engineering Company) en el aeropuerto internacional de Hong Kong en Chek Lap Kok. Fue un momento magnífico para unirme a la empresa y participar en los diez proyectos principales del aeropuerto, que permitieron el traslado del aeropuerto de Kai Tak a Chek Lap Kok.
Me formé como inspector de obras (quantity surveyor) en Londres. Esta profesión me atrajo porque me permitía trabajar con muchas personas distintas y emplear mis destrezas analíticas. Trabajé en el área de consultoría para un organismo público y para un contratista, lo que me permitió adquirir una experiencia muy variada.
Después me trasladé a Ghana, en África occidental, donde trabajé en varios proyectos sanitarios y educativos. Creo que haber trabajado en diferentes países, culturas y organizaciones me ha permitido desarrollar la capacidad de entender mejor a los clientes y de considerar distintos puntos de vista con objetividad.
Me gusta trabajar con los clientes para que obtengan la mayor rentabilidad posible de su dinero y vean que Currie & Brown realmente añade valor a sus proyectos. Disfruto de la colaboración en proyectos con las distintas partes de nuestra empresa en todo el mundo y del trabajo en el comité directivo para dar forma al futuro del negocio. Estas dos facetas me permiten conocer mejor los retos a los que se enfrentan nuestra empresa y nuestros clientes en todo el mundo.
Currie & Brown es diferente a otras empresas. Los empleados de Hong Kong trabajan arduamente y con dedicación, y muchos de ellos son profesionales con una larga trayectoria. La empresa adopta las innovaciones tecnológicas y ofrece la oportunidad de impulsar cambios dentro de nuestro sector. Como parte de su filosofía, fomenta la formación y la obtención de cualificaciones profesionales al tiempo que respeta la conciliación entre la vida laboral y la personal, lo que me he permitido desarrollar mi trayectoria profesional y tener una familia.